La ventana abierta de mi alma vagabunda. Soy Yo.

La ventana abierta de mi alma vagabunda. Soy Yo.
Un poco de como se ve el mundo desde mis ojos.

domingo, 28 de febrero de 2010

Ochenta y tantos y Caín.

Hace días y aprovechando como hoy a matar dos pájaros de un solo tiro, fui a Zipaquira a llevar una encomienda a mi primo Felipe Morales, futuro arquero de la selección Colombia valga decirlo, y por ahí derecho a visitar a mi abuela materna recluida en un ancianato o como otras esferas sociales lo llaman “hogar geriátrico” en nuestro caso del gobierno, valga aclarar también.
Digo matar dos pájaros de un solo tiro por q inmediatamente después de verla quise escribir algo, pero no me salió nada, sin embargo hoy, después de reflexionar sobre lo escrito por Saramago acerca de Caín, me encuentro con q mi abuela tiene mucho q ver con mi propia marca, con mi sino, y como también me sentí motivado por la sabrosa lectura, aquí voy.

Pregunté a mi madre de camino al geriátrico q cuantos años tenía mi abuela, ella me respondió con su tonito medio valluno… “Ochenta y tantos, pero la cedula dice q tiene Noventa y algo” Dice q no saben la edad exacta pero q calculando con la edad de mi tiastro más viejo, o sea su hermanastro mayor, q tiene más o menos 67 años y teniendo en cuenta q ella lo tuvo según recuerda su demencia senil antes de los 15 pero después de los 13, llegamos a una brillante pero no tan exacta conclusión: nadie sabe cuántos años tiene mi abuela.
La ultima vez q la vi fue hace un par de años, en uno de esos regresos de paso o también llamadas visitas a Bogotá. Para ese entonces mi abuela ya no se acordaba de mí, después de un rato me confundió con el hijo de mi tiastro el sastre y por aquí además de enmarañarse la historia podemos empezar a hacer un trabalenguas.
Mi abuela es la única hija entre muchos varones, hijos de una relación prohibida y condenada, de la única hija de un español viudo q se vino a Colombia a sembrar café, relación pasional con el capataz de sus tierras, un indio mezcla de Caribe y Chibcha de aquellos acostumbrados a pescar en el Atrato, nadar en el Magdalena y hacer paseo de olla en el Cauca. Paseo de olla de barro obviamente.
De lo q no estoy muy seguro y eso gracias a la demencia senil de mi abuela, sus ochenta y tantos y sobre todo al velo q se tiende sobre el tema familiar, es de cuál de las tribus aborígenes de Antioquia desciendo yo. Tahamíes, Nutabes, chocóes o pantágoras a estas alturas da igual, Urabáes o Cunas. Quimbaya no creo, el indio este no era tan viejo, al menos eso pienso yo.
Hijo del bisnieto de algún antiguo cacique si tenía q ser el condenado por q no entró a trabajar de peón en la finca, ni a recoger café como los q no tienen ningún otro oficio, el petizo este llego a mandar, reiterando mi teoría de q no hay peor combinación q la del poder con la ignorancia. Mucha ética no creo q tuviera y eso es un mal de familia hasta nuestros días, Sin embargo algún encanto debía tener el nativo aquel para poder conquistar a la europea esta, q además era la hija del dueño del aviso. ¿Abrase visto?
Algo q si les puedo afirmar es q por nuestra sangre corren genes de los llamados por los españoles “Caribes” Estos eran los más bravos, los de flecha envenenada, o mejor, los de flecha con punta envenenada (vaya uno a saber si de estos degenerados viene la costumbre de los bandidos de untar con heces de humano las puntas de sus navajas o las balas de sus pistolas de marca o hechiza, para q por si acaso la futura víctima no muere del tiro o puñalada, se muera de la infección q luego les va producir gangrena, o q por lo menos le tengan q amputar algún miembro. cierro paréntesis) esos q naturalmente, o sea de forma natural no obvia, practicaban sodomía y canibalismo sin q les importara un pepino q esas costumbres en su tierra no tuvieran las repercusiones ni los rótulos tan pesados de los españoles, q bien es sabido traían sus propias aberraciones. Ya me imagino a los hipócritas españoletes sumidos en el escándalo por la sodomía tan natural de mis híper-ultra-súper-plus-tatarabuelos, los q vivían en la zona bautizada de forma no tan original por los conquistadores: Antioquia.
El nombre Antioquia es una remembranza a la provincia turca de Antakya / Antioquía, a su vez nombre dado por el conquistador griego macedonio Ptolomeo Iº a esa ciudad y su región en honor a su padre Antíoco, General de Alejandro Magno, que posteriormente se convertiría en la provincia romana de Siria. Allí surgieron los primeros cristianos de origen no judío, tal como se lee en los Hechos de los apóstoles. ¡Y q conste q les evito la buscadita en Wikipedia!

Toda esta retahíla era solo para decir q por fin voy entendiendo por q mi familia está llena de putas, ladrones, maricas y otras calañas. ¡AH! también era para decir q tengo algo de paisa, algo de indio, algo de europeo y algo de bíblico, lo de bíblico para distraer acerca de la sodomía, prefiero q piensen q es por su origen etimológico y no por aquello de las prácticas homosexuales. Pero soy rolo… q desgracia. Y q conste q soy partidario de q cada quien puede hacer de su culo un florero si bien le place.

Mi madre tmbn es la hija única entre muchos varones, místicamente esto se puede tomar como una maldición, pero debe tener su interpretación biológica con aquello de los genes, algo así mezclado con costumbres por parte de mi madre, quien tampoco tuvo más hijos y por ahí metámosle un poco de intervención divina. Yo debería tener una hermana 8 años menor, pero por caprichos del destino, una pastilla auto recetada para el dolor de muela y según versiones, un golpe de mi progenitor a mi madre, dicha hermana fue abortada, digámoslo no tan cruel… por caprichos de la naturaleza.
Finalmente llego al asunto de Caín.

La primera vez q supe de este tal Caín fue muy pequeño en la escuela dominical de la Iglesia Pentecostés donde asistía mi abuela quien por esa época todavía andaba frondosa, dicharachera y calenturienta, aunque estoy casi seguro q por aquel entonces ya no sabía cuántos años tenia o había preferido olvidarlo.
Se me presento la historieta de Caín y su hermano el asolapado de la misma forma q todos la conocen, obviamente el malo era quien ya sabemos. Aquel q no tiene el beneficio de la duda, a quien la justicia lo trata como normalmente se aplica y no como debería, él es culpable hasta q se demuestre lo contrario. El relato pasó desapercibido pero no dejo de inquietarme la forma en q alguien puede matar a su hermano con una quijada de un burro, ahora q lo pienso q imaginación mas prodigiosa la del autor… a mi no se me hubiera ocurrido nunca, mucho menos matar por sospechas de predilección divina, y peor aun a mi hermano menor, pero lo de la quijada es un apunte muy serio. Sera menester ubicarse en la época para ver q otras cosas se hacían con la quijada del burro; q los antropólogos, o en su defecto los teólogos nos iluminen.
Hay quienes sostienen q la interpretación está mal, q lo q quiere decir realmente es q Caín mato a su hermano a quien amaba demasiado como sacrificio para demostrarle a Dios q si era un hombre digno de su predilección, gran cosa, como si acaso se notara. Dicen esto también basándose en lo q le dijo Dios a Caín cuando vio lo q había hecho, valga la redundancia por q se supone q Dios todo lo ve y todo lo sabe, justamente fue eso lo q Caín le reprocho al señor, del por q no había evitado el primer asesinato de la historia.
Pienso q era necesario un chivo expiatorio y en esto el dios q nos han vendido es bastante diestro. Otros dicen q la traducción está mal tmbn y lo q quiere decir la biblia es q lo mato por burro, o sea por tonto. Lo cierto es q por ningún lado en la biblia dice q lo mató con la quijada de un burro, a mi lo único q me inspira la quijada de un burro es hacer música carranguera y usarla de guacharaca, guacharaca de tocar música carranguera, no la de disparar, q por cierto si Caín hubiera sido tan malo como dicen, les aseguro q hubiera inventado alguna forma mas áspera de cometer dicho crimen.
Según lo supuesto tmbn hubiera podido cometer el crimen perfecto, en esa época no tenían ni la más mínima idea de antropología forense ni de perfiles sicológicos de asesinos, ni recopilaban pruebas en la escena del crimen. Hubiera sido muy fácil matar al preferido sin dejar rastro, esto da fuerza a la idea de lo q realmente quería Caín, se supone q cuando el señor le comenta acerca de la sangre “La voz de la sangre de tu hermano clama a mi desde la tierra” es por q dicho crimen en particular se hizo a manera de sacrificio y a la vieja usanza de cortar el cuello del sacrificado ya sea animal o humano aunque la diferencia no sea muy notable en este caso y dejar q toda esa sangre regara la tierra.
Pero esto no es ciertamente lo q nos compete.
La segunda vez q escuche del tal Caín fue en “Demian” de Herman Hesse. Y aquí va la cita:
“Al colegio llegó un chico llamado Max Demian; era huérfano de padre y rico; aunque era mayor que Emil, se hicieron amigos y discutían sobre las asignaturas.
Max empezó a hablarle sobre la historia de Caín; al finalizar, Emil llegó a la errónea conclusión de que Caín había sido un hombre noble, pero incomprendido y Abel un cobarde y que debido al estigma que Caín llevaba en la frente, habían inventado el resto de la historia; Emil dedujo que muchas de las cosas de la Biblia eran falsas; pero Max le dijo que eran verdad, pero mal explicadas.
Cuando Max se fue, Emil recapacitó de lo hablado y pensó que le habían tomado el pelo, pues cómo era posible que Dios no hubiera actuado; Max lo había engañado; pensó que Max era un Caín, al hablar con desprecio de los débiles y piadosos.
Max se enteró de cómo Kromer atormentaba a Emil; entonces le dijo que si no podía librarse de él, que lo mate”
Obviamente les recomiendo leer concienzudamente a Herman Hesse.

Los incomprendidos, los errantes, aquellos q no tienen el beneficio de la duda, aquellos a quienes la gente teme sin una razón aparente. Esos capaces de emprender cualquier empresa sin importar si sus ofrendas son o no aceptadas, decentes. Esos mismos q no tienen reparo en desenmascarar a quien sea. Los q van por la calle sin mirar atrás por q sin saberlo llevan la marca, la maldición de Dios, y q conste q dios maldice, Q CONSTE. Esa marca por la q todos estos digamos mortales prefieren alejar la silla en el salón de clases, por la q los delincuentes no se atreven siquiera a atreverse. Esos de la mirada hipnotizadora, los q proyectan su energía, los q todo lo arreglan arruinándolo, los q se atreven a saltar. Los q poco a poco y después de sufrir los desprecios y las burlas van desarrollando esa personalidad apabullante, los mismos a quienes les golpeaban, rechazaban, humillaban o de cualquier forma eran vilipendiados por sus pares, esos pares q pasado el tiempo se hincan.
De los q hablo es de quienes marcan la diferencia por q han sido maldecidos. Malditos vagan por el mundo enseñando q ninguna maldición es tan grave ni el más grande impedimento realmente impide.
Hijo único de esa disque maldición Caín como muchos de nosotros tiene q abrirse paso, esto nos hace mejores, por eso nos tragamos la vida, por q no somos los hijos favoritos de Dios, por q tenemos arrojo, por q la gente nos teme. Por q somos asesinos de débiles costumbres, por q nos atrevemos a cambiar el mundo, por q inventamos nuestra propia ley. La tierra no dará sus frutos a Caín, así deja de ser agricultor.
Nosotros capaces de crear empresas de la nada, normalmente las ovejitas negras de las familias, los rebeldes disque sin causa, los q no soportamos horarios, los q sabemos el verdadero significado de tolerancia, los q no tememos a la noche ni a sus oscuras adversidades, a los q todos creen derrotados por q nos ven sentados cabizbajos. Estos q no se esconden… estos de quienes ustedes hermanos de Abel, hijos preferidos de Dios tienen mucho q aprender… estos mismos.

Los hijos de Caín.